los retos y tareas pendientes del fútbol femenino para este 2025
Después de otro año histórico para el fútbol femenino, español y mundial, hemos cerrado el 2024 por todo lo alto y con las miras puestas en el lo que viene. El nuevo año supone nuevos retos y asuntos, todavía pendientes, para todo lo que nos rodea. ¿Quieres saber cuáles son?
El fútbol femenino no para de avanzar. Estos pasos hacia adelante suponen, además de un orgullo enorme, nuevas responsabilidades, retos y aspectos a mejorar por parte de todos. Hemos decidido hacer una lista de propósitos para este 2025 para todas las partes que formamos el fútbol femenino español. Empezando por clubes, por las jugadoras, la competición y, como no, terminando con las agencias, haciendo un poco de autocrítica y enfocándonos en lo que también tenemos que mejorar.
¿QUÉ PUEDEN MEJORAR LOS CLUBES?
A nivel de estructura y facilidades para las jugadoras, los clubes ya están demostrando una profesionalidad inimaginable unos años atrás. Pese a ello y a los esfuerzos que están haciendo, nos imaginamos un futuro ideal en el que:
Todos los clubes faciliten las dietas a las jugadoras. Que las deportistas se tengan que preocupar sólo por mejorar en el campo y su recuperación. Facilitarle la tarea de la nutrición con comidas aportadas por los clubes hará que potencien sus virtudes y, en definitiva, que los clubes se beneficien de este mayor rendimiento.
También nos imaginamos un futuro ideal en el que los clubes tengan instalaciones propias para su sección femenina. Un campo de entrenamiento, unos vestuarios o gimnasios propios que no tengan que ser compartidos con otras secciones del club. Lo ideal, son casos como el de la Real Sociedad o Eibar, que en los últimos meses han dado un empujón a sus nuevas ciudades deportivas.
Profesionales de la salud y centros médicos de élite, al igual que se le pide a las jugadoras ser las mejores, que los equipos de salud, también lo sean. Lamentablemente, vemos muchas lesiones de gravedad en el fútbol femenino y las recuperaciones no siempre son las idóneas.
A nivel comunicativo, tener equipos también completos. Evitar las "personas orquesta" que hacen todas las tareas comunicativas y de imagen del club para, así, poder ofrecer un producto más interesante desde dentro de los clubes.
¿QUÉ PUEDE MEJORAR LA COMPETICIÓN?
Si los clubes tienen tareas pendientes y retos por delante, la competición en sí está en la misma situación. Quizás no deportivamente, ya que el nivel general no deja de subir, pero sí en otras competencias.
¿Lo principal? Hacer una promoción de la competición a gran escala. Gestionar eventos de valor, buscar un patrocinador oficial (ya sea para naming o para cualquier otro aspecto) y aumentar la difusión digital, que ya hemos visto que este año se está intentando. Tenemos la suerte de tener en la liga a las mejores jugadoras y al mejor equipo del mundo y, a veces, sentimos que no se está aprovechando del todo.
También se debería hacer el fútbol femenino más accesible y público a nivel de difusión en medios y en la televisión. Existe el pensamiento colectivo de que se debería haber creado una base antes de comercializar televisivamente el producto, y si no se ha hecho, se ha de trabajar por conseguirlo a partir de hoy.
¿QUÉ PUEDEN MEJORAR LAS JUGADORAS?
Las principales protagonistas de todo esto, no nos olvidemos, son las jugadoras. Ellas son las que han levantado el fútbol femenino y las que lo han elevado al nivel en el que está hoy. El resto solo podemos ayudarlas a seguir haciéndolo y, es por ello, que también tienen que trabajar por el futuro.
Las jugadoras son profesionales, pero han de seguir esforzándose y trabajando todo lo que ello conlleva. Es difícil, pero si a todas las futbolistas se les dotara de un salario digno, desde la que más genera individualmente hasta la que menos, todas se tomarían el fútbol como su principal foco laboral diario y, por ende, su principal fuente de ingresos. De esta forma, podrían centrarse al 100% en mejorar y seguir trabajando en su pasión.
¿QUÉ PUEDEN MEJORAR LA AGENCIAS?
Haciendo autocrítica, quizás seamos las que más tenemos que trabajar y adaptarnos a las otras tres partes que hemos mencionado.
Lo primero que tenemos que hacer es progresar al mismo ritmo que avanza el fútbol. Tenemos que llegar hasta donde antes no lo hacíamos y, como dice el dicho, "reinventarse o morir". Hace unos años las futbolistas demandaban un servicio y hoy es más complejo y diferente. Aparece el marketing, por ejemplo, cuando antes no era una prioridad.
Rodearnos de los mejores. Sabemos que no hay una personas que sepa de todo. Por ello es importante formar equipos compuestos por profesionales cualificados, con pasión y conocimientos de cada ámbito.
Debemos tener más los pies en la tierra. Ser conscientes de lo que podemos y no podemos hacer por una jugadora. Ante todo, ser sinceros con ellas y no desviarlas del principal foco de su actividad: el fútbol.
Lo más importante, ser hiper responsables. No podemos normalizar el hecho de que las jugadoras están poniendo su presente y, sobre todo, su futuro en nuestras manos. Es una decisión de un valor enorme y la confianza que están mostrando en sus agentes es máxima. Por ello, tenemos que seguir trabajando responsablemente y priorizar, siempre, lo que es mejor para ellas y no para la agencia.
Todo esto se resume, en definitiva, en estar a la orden de las normativas de la FIFA implantadas en los últimos años y que todas las agencias deberíamos cumplir.
Muchos deberes por delante, pero un desafío bonito por seguir cuidando lo que más nos gusta.
Comments